Artista total. “Dejé la universidad para vender un cuadro por 20K”
 

Silvia Flechoso cursó tres años en la carrera de Filosofía en la Universidad de Valladolid y dos en el grado de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid. Al poco tiempo, se dio cuenta de que su camino no se encontraba en la vía académica y optó por dar un salto al vacío para construir su propia carrera artística de manera autónoma y autodidacta, apoyándose en el estudio y la práctica de figuras como Tiziano, Velázquez o Caravaggio. Flechoso concibe al ser humano como un practicante mágico, y entiende el arte como una extensión del mismo, resultando la más poderosa herramienta mágica para la transformación. Afirma que "el Arte es una tecnología religiosa", y lo define como "la revelación sensible de lo Sublime a través de la técnica".
 

La práctica artística se convierte en un vehículo para la Autorrealización y la Autotrascendencia. Es en el proceso creativo donde opera el arte, más que en la obra en sí. La obra de arte es el resultado de ese proceso de transformación, y se presenta ante el espectador como un enigma que logrará resolver en la medida en que sea capaz de transformarse a sí mismo.
 

El poder transformador de su obra se fundamenta en que siempre hay un antes y un después en nuestra vida cuando en un momento inesperado nos damos cuenta de algo que segundos antes ignorábamos y de repente acaece ese instante, ese clack, en cambia por completo nuestra visión del mundo, consecuentemente nuestra forma de interactuar con él y, en última instancia, nuestro destino. Por ello encuentra el éxito de su trabajo cuando la obra es una pregunta.
 

Ha realizado exposiciones a nivel nacional e internacional, siendo reconocida en prestigiosos certámenes de pintura como Figurativas '19 y Modportrait '20 entre otros. En 2021 su obra La Pietà, representada por el cantante C. Tangana como Jesucristo y la Presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso como Virgen, obtuvo gran reconocimiento a nivel nacional, saltando a la fama y convirtiéndose en un verdadero fenómeno mediático.